Un corazón que sufre, no conoce razones
Por Becky Krinsky Braverman
¿Qué consuelo se puede dar a padres que acaban de perder a su hijo? ¿Cómo se puede consolar a una familia por la muerte de la mujer que tanto los amaba y los mantenía unidos? ¿Habrá alguna una explicación justa? ¿Qué se les dice a las personas que tienen el alma desgarrada, el corazón roto y el pensamiento vacío? ¿Cómo retomar los planes que habían soñado sobre todo si estos incluían a la persona que recién se fue?
El dolor que causa la muerte no se puede describir, a pesar de que cada quien lo vive a su manera, en realidad es un sentimiento claro que se percibe y sin palabras se entiende. Unos con lágrimas, otros con enojo y con reproches, algunos con silencio, pero todos sienten el vacío, la soledad y la tristeza que se apoderan cunado se sufre y no se encuentra consuelo.
Tristemente, para unos las ilusiones y los planes de vida se desaparecen sin explicación, para otros la agonía y el sufrir de la condición delicada se ha transformado en una perdida y un encuentro con una nueva realidad, otros finalmente comprenden el significado de las palabras “demasiado tarde” porque ya no hay con quien hablar, con quien disculparse, llego el final, sin pedirlo y sin entenderlo… Seguir Leyendo.»»
0 comments:
Post a Comment